Piden restablecer institucionalidad
CONFLICTO EN EL DEPORTIVO SAJONIA
Miembros de la comisión directiva, cesados según sostienen en forma ilícita por el actual presidente, Luis Flor Luna, dieron su versión acerca del conflicto existente en el Deportivo Sajonia. Informaron del interés de crear una mesa de diálogo para restablecer el orden institucional.

Germán Alcaraz, Francisco Patiño, Gilberto Penayo y Oscar Mosqueda.
Francisco Patiño, vicepresidente; Gilberto Penayo, socio y abogado de la comisión directiva; Germán Alcaraz, secretario; y Oscar Mosqueda, tesorero, llegaron hasta la redacción de ABC según manifestaron para refutar las declaraciones vertidas por el presidente del Club Deportivo Sajonia, Luis Flor Luna; y dar a conocer el interés del grupo de restablecer la institucionalidad al Sajonia.
Gilberto Penayo dijo que “el presidente está administrando el club en forma antijurídica, en forma ilícita, porque los reglamentos y el estatuto del club obligan a que esta institución sea administrada por una comisión directiva en forma colegiada o conjunta”. Esta declaración la hizo en referencia a las expresiones de Flor Luna –publicadas en nuestro diario en la edición del jueves 19 pasado– que dijo que por una cuestión estatutaria se veía obligado a administrar solo el club. Penayo citó el artículo 13 del estatuto, referente a la administración del club, y que señala que la entidad social será administrada, dirigida y representada en todos sus actos y contratos por una comisión directiva compuesta de 10 miembros titulares y 3 suplentes”.
El abogado también expuso que lo que está pasando en el Deportivo Sajonia es “muy grave porque este señor (por Flor Luna) se opone a que la comisión directiva cumpla sus funciones. “Esta sigue vigente y prueba de ello es la resolución emitida por el juez electoral Víctor Poletti, que ordenó la restitución de todos los miembros de la comisión en pleno. Luna dice que ya no están en sus funciones, que están cesantes porque no se reúnen más, pero él se apoderó del libro de actas y lo maneja en forma unipersonal, cosa que nosotros denunciamos en la fiscalía barrial N° 3”. Penayo señaló también que Luna “firmó un acta en la que manifestó que da cumplimiento a la orden judicial, sin embargo no permite el acceso a los directivos para sesionar, apoyado por guardias privados, y un grupo de socios, que no son directivos”.
Inicio de la crisis
Según explicó Francisco Patiño, vicepresidente electo en asamblea, cesado por Flor y repuesto en su tarea junto a los otros miembros por el juez Poletti (por resolución 28 del 21/08/08), la crisis se inició cuando el presidente Flor Luna “tomó la decisión unilateral, absolutamente ilícita, de dejar cesantes a los 7 miembros de la comisión directiva, sin aviso, ni sumarios; y al hacerse un sumario se necesitan firmas conjuntas. El firmó una resolución solo y nos dejó cesantes a todos. Luis sabe que todos los documentos deben estar aprobados con la firma del presidente y la comisión; si no, es nula”. Consultado acerca de si era verdad que la ausencia continua a las sesiones fue el motivo de la cesación, el abogado Penayo respondió: “pasa que el acta la tiene él, cuando ese libro debe manejarlo el secretario, y no le deja. Entonces él concentra en su persona la función de presidente, secretario y tesorero. Tampoco rinde cuentas. Es mentira que la asamblea le haya aprobado su balance y pueda administrar solo. Eso no formaba parte del orden del día”.
En otro momento reconocieron que se hizo una auditoría externa, pero alegaron que esa no puede sustituir al órgano contralor natural de la institución, que es la Comisión Revisora de Cuentas. Comentaron también que ninguno de los miembros puede acceder al área administrativa, porque se mantiene llaveada y con guardias privados.
Gilberto Penayo dijo que “el presidente está administrando el club en forma antijurídica, en forma ilícita, porque los reglamentos y el estatuto del club obligan a que esta institución sea administrada por una comisión directiva en forma colegiada o conjunta”. Esta declaración la hizo en referencia a las expresiones de Flor Luna –publicadas en nuestro diario en la edición del jueves 19 pasado– que dijo que por una cuestión estatutaria se veía obligado a administrar solo el club. Penayo citó el artículo 13 del estatuto, referente a la administración del club, y que señala que la entidad social será administrada, dirigida y representada en todos sus actos y contratos por una comisión directiva compuesta de 10 miembros titulares y 3 suplentes”.
El abogado también expuso que lo que está pasando en el Deportivo Sajonia es “muy grave porque este señor (por Flor Luna) se opone a que la comisión directiva cumpla sus funciones. “Esta sigue vigente y prueba de ello es la resolución emitida por el juez electoral Víctor Poletti, que ordenó la restitución de todos los miembros de la comisión en pleno. Luna dice que ya no están en sus funciones, que están cesantes porque no se reúnen más, pero él se apoderó del libro de actas y lo maneja en forma unipersonal, cosa que nosotros denunciamos en la fiscalía barrial N° 3”. Penayo señaló también que Luna “firmó un acta en la que manifestó que da cumplimiento a la orden judicial, sin embargo no permite el acceso a los directivos para sesionar, apoyado por guardias privados, y un grupo de socios, que no son directivos”.
Inicio de la crisis
Según explicó Francisco Patiño, vicepresidente electo en asamblea, cesado por Flor y repuesto en su tarea junto a los otros miembros por el juez Poletti (por resolución 28 del 21/08/08), la crisis se inició cuando el presidente Flor Luna “tomó la decisión unilateral, absolutamente ilícita, de dejar cesantes a los 7 miembros de la comisión directiva, sin aviso, ni sumarios; y al hacerse un sumario se necesitan firmas conjuntas. El firmó una resolución solo y nos dejó cesantes a todos. Luis sabe que todos los documentos deben estar aprobados con la firma del presidente y la comisión; si no, es nula”. Consultado acerca de si era verdad que la ausencia continua a las sesiones fue el motivo de la cesación, el abogado Penayo respondió: “pasa que el acta la tiene él, cuando ese libro debe manejarlo el secretario, y no le deja. Entonces él concentra en su persona la función de presidente, secretario y tesorero. Tampoco rinde cuentas. Es mentira que la asamblea le haya aprobado su balance y pueda administrar solo. Eso no formaba parte del orden del día”.
En otro momento reconocieron que se hizo una auditoría externa, pero alegaron que esa no puede sustituir al órgano contralor natural de la institución, que es la Comisión Revisora de Cuentas. Comentaron también que ninguno de los miembros puede acceder al área administrativa, porque se mantiene llaveada y con guardias privados.